Lucy -“El Orden” (Rebel Sound, 2025) 

Por Miguel Díaz Herrero 

Son días jodidos los que nos ha tocado vivir. Siempre ha habido machismo, racismo, desigualdades sociales, países o líderes políticos actuando como brutales sátrapas, pero en la actualidad ser malo y no sentir empatía por el prójimo parece disculparse en nombre de no sé qué absurda batalla cultural. 

Vivimos tiempos en los que parece que hubiera que respetar las teorías más peregrinas, incluso la homofobia, la transfobia, la xenofobia, porque a quienes infunden el odio desde sus tribunas después se les llena la boca hablando de “libertad de expresión”. Pero más allá de posicionarnos con nuestros amigos y familiares, en nuestros lugares de trabajo (cuando podemos hacerlo), seguimos con nuestra rutina diaria aceptando estas injusticias como algo que nos hemos creído que no podemos cambiar. 

Lucy, cuatro punkies madrileñas de nombre Neli (voz), Laura (guitarra), Claudia (bajo) y Tata (batería), han decidido, sin embargo, responder a todo esto a ritmo de hardcore-punk, con letras agresivas y contundentes. En “El Orden”, disco que han ido adelantando en los últimos meses, sencillo a sencillo, y que publicaron al completo el pasado 24 de septiembre, no cabe esperar medios tiempos ni críticas domesticadas al sistema. 

“Ya No Hay Paz” empieza con ciertos aires grunge, para acabar en un estallido hardcore hablándonos de precariedad y una vida en la que la mayoría de cosas nos vienen ya impuestas. “La Última Cena” es su “Eat The Rich”. Y es que no deja títere con cabeza: ricos, alcaldes, puteros… 

“Tourist Go Home” es una afilada diatriba contra la turistificación. Su gráfica letra (“Salta del balcón / a ver si mueres ya / y así mi alquiler / vuelve a bajar”) incluso llegó a montar cierto escándalo en las redes del grupo. En “Porno Desgarrador” hay rabia y empoderamiento (“No eres más que un dildo en mi puto cajón”), mientras que “Carne De Presa” retrata un sistema que persigue al que no encaja y lo etiqueta de bruja o ladrón. 

El disco no baja ni un ápice a lo largo de sus doce canciones, ni en velocidad ni en rotundidad. Así, “Lana” es un potente alegato contra la violencia contra las mujeres (“La hembra que creías tuya te va a despedazar”), y “Puntas De Acero” se postula activamente contra las manadas y el machismo imperante. El auge del fascismo en redes tampoco se escapa de su discurso, y en “Neofacha” hablan desde el cerebro vacío del niñato que utiliza su púlpito para decir las mayores salvajadas mientras se queja de falta de libertad. 

Lucy llevan desde 2022 tocando en muchas de las principales salas del país (y lo que les queda), ganaron el certamen Mad Cool Talent el año pasado, pero no parece que nada vaya a amansar su discurso. Son valientes, y mi sensación es que van a dar mucho que hablar. Ya lo están haciendo.